
The family has been in the al-Sabeen cholera clinic in Sanaa, Yemen, for about three hours, because son Ayman has symptoms of cholera. Daughter Athir is sad, because she is not allowed to stay in the tent with her brother. Father got a cholera brochure from Yemen Red Crescent, explaining the cause of cholera and how to prevent it.
On that day, the number of cholera patients decreased a little bit, before increasing again the day after. Mostly women and children affected in this specific clinic.
Photo: Maria Korkunc/Norwegian Red Cross
YEMEN – LA CRISIS HUMANITARIA DE LA QUE NADIE HABLA
Proyectar Nación
Lic. Macarena Acosta
Naciones Unidas advierte que el país se dirige hacia «un colapso total»
80% de la población depende de algún tipo de ayuda humanitaria….
METIÉNDONOS EN TEMA
La República de Yemen se ubica en el extremo del Cuerno Arábigo, y es relativamente nueva: nació en 1990, cuando se fusionaron los países de Yemen del Norte y Yemen del Sur. Al poco tiempo ya hubo conflicto: en 1994 un movimiento separatista del sur fue derrotado luego de una corta Guerra Civil, y en 2009, las fuerzas gubernamentales se enfrentaron a los rebeldes conocidos como «Houthi»; enfrentamientos que resultaron en cientos de muertos y más de 250.000 desplazados.
En 2011, una nueva ola de protestas inspiradas en la «Primavera Árabe» que se originó en Túnez y Egipto desencadenó en la renuncia del entonces presidente de Yemen, Ali Abdallah Saleh. Lo sucedió Abdrabbuh Mansour Hadi, que en 2015 fue derrocado por los Houthi, y huyó de la capital. Desde ese momento Yemen se encuentra dividida por una cruenta guerra civil.
LOS ACTORES EN EL CONFLICTO
Los Houthi son un grupo de seguidores del zaidismo, una rama del islam chiíta, apoyados por Irán. Inicialmente comenzó como un movimiento en defensa de los zaidíes, frente a la discriminación socioeconómica que padecen y el ascenso del extremismo sunnita. Estuvieron muy involucrados en las revueltas que dieron como resultado la dimisión del entonces presidente Saleh, y cuatro años después tomaron Sanáa, la capital de Yemen, obligando al Presidente Hadi a huir.
Declararon que el Parlamento había sido disuelto y reemplazado por un «Consejo Revolucionario transicional», pero la Unión Europea, Estados Unidos, y el Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo no se lo reconocen.
Actualmente controlan todos los ministerios, el Banco Central y el aeropuerto internacional, además de los medios de comunicación. Esto último, en especial lo relativo a la radio y la TV, reviste especial importancia dado el alto índice de analfabetismo en la sociedad yemení.
El ex-presidente Hadi, al ser derrocado por los Houthi, se refugió en la ciudad de Aden, donde estableció una «capital» temporaria. Hadi es el único presidente reconocido por la comunidad internacional, y cuenta con el apoyo de Arabia Saudita y su coalición (Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Kuwait, Qatar, Egipto, Jordán, Marruecos), y los Estados Unidos, que le facilitan armas a Arabia Saudita.
Pero hay otro contendiente: el ex-presidente Saleh, el antecesor de Hadi. Durante su mandato, Saleh libró seis enfrentamientos armados contra los Houthi, y sin embargo, son ahora aliados tácticos en contra de Hadi. Sus fuerzas consisten mayoritariamente en parte del Ejército que aún le es fiel, algunos miembros de quienes fueron su guardia presidencial, y diversas milicias tribales.
Para complejizar más las cosas, los Houthi y los defensores de Saleh, por ser chiítas, son blanco de Al-Qaeda y El Estado Islámico, ambas agrupaciones con presencia en el país.
LAS CONSECUENCIAS
Arabia Saudita, -el mayor productor de petróleo del mundo- respaldado por el armamento que le vende Estados Unidos -el mayor vendedor de armas del mundo-, hace ya dos años que bombardea Sanaá, la capital de Yemen -el país más pobre del mundo árabe-. Su objetivo es desplazar a los Houthis y devolver el poder al ex-presidente Hadi. La situación es catalogada como la mayor Catástrofe Humanitaria del mundo, con 16.000 muertos, de los cuales unos 10.000 son civiles. En Yemen, cada diez minutos muere un niño (Unicef). La guerra además generó terreno propicio para el crecimiento de Al-Qaeda, que se beneficia del caos y la falta de seguridad.
Constantemente se llama la atención sobre el accionar de Arabia Saudita y su coalición, quienes reiteradamente incurren en crímenes de guerra, bombardeando zonas residenciales, hospitales, y hasta mercados, y bloqueando las rutas de acceso a la ciudad de Sanaá a los diversos grupos de ayuda humanitaria que intentan combatir la crisis.
Debido a los bombardeos, la coalición de Arabia Saudita destruyó el sistema de cloacas de la ciudad, lo que sumado a la falta de agua potable y el hambre que sacude a la población (se calcula que unas 7 millones de personas están desnutridas, en su mayoría niños) provocó una epidemia de cólera de dimensiones pocas veces vistas.
Esta epidemia tuvo su pico durante el mes de Junio, cuando se reportó que la enfermedad mataba una persona por hora. Hacia la mitad de ese mes, se calculaba que los enfermos llegaban a 124.000, y que 20 de las 22 provincias de Yemen estaban afectadas. Los datos más actuales que se tienen, provenientes de UNICEF y de la OMS, hablan de casi 400.000 infectados confirmados, con 2.000 muertos. La situación se complica ya que las rutas de acceso, los puertos, y el aeropuerto están bloqueados por los Houthis, que no permiten el paso de víveres ni medicinas. Las ONGs trabajando en el área también encuentran dificultades para abastecerse de combustible, lo que les imposibilita llegar a las áreas alejadas más necesitadas de la ciudad.

Wikimedia Commons – 18FEB14
A pesar del desastre humanitario al que todas estas situaciones están contribuyendo, la coalición de Arabia Saudita está cada vez más lejos de cumplir su objetivo, ya que su accionar debilita la posición del ex-presidente Hadi y generó fracturas entre sus aliados, algunos de los cuales están persiguiendo fines propios aprovechándose de la situación, como los separatistas del Sur.
A los Houthi se los acusa además de acallar las voces en su contra y de incurrir en detenciones ilegítimas y desapariciones forzadas, por lo que los ciudadanos yemeníes temen que si la coalición Saudita se repliega, los Houthis ganarán más fuerza.
Según el reporte sobre derechos humanos de la ONU publicado el 5 de Septiembre, prácticamente todas las leyes de guerra se están violando. Se reportaron ataques aéreos que tuvieron como blanco a civiles; uso de armas de guerra prohibidas, y niños de hasta 10 años siendo reclutados como soldados.
En muchos casos, la información obtenida sugiere que la población civil fue blanco directo de los ataques, o que la operaciones fueron llevadas a cabo sin considerar el impacto en la población civil ni tener en cuenta los principios de distinción, proporcionalidad, y precaución en el ataque. En algunos casos, la información sugiere que no se tomó ningún tipo de acción posible para mitigar el impacto en los civiles de las operaciones de guerra.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, dijo que es crucial que se establezca una investigación internacional e independiente sobre el conflicto en Yemen.
«Apelo a todas las partes del conflicto (…) a que tengan piedad por la gente de Yemen, y que tomen medidas inmediatas para asegurar ayuda humanitaria para los civiles y justicia para las víctimas de violaciones. (…) Hago un llamamiento a todas las partes a cesar las hostilidades y a trabajar arduamente en pos de una solución negociada y durable, para que así la gente de Yemen pueda finalmente reencontrar la paz» Dijo el Alto Comisionado Zeid.
* * *
NOTA SOBRE ZAIDISMO: El zaidismo es una rama del chiísmo, dentro de la religión islámica. Viven en el norte de Yemen (donde son mayoría) y en Arabia Saudita.Es la rama chií más próxima al sunismo, pues consideran que el imán no está guiado por Dios y por lo tanto no es infalible.
